Las distintas mujeres que acompañaron a lo largo de la historia a los presidentes de los Estados Unidos mostraron buen gusto y estilo a la hora de vestirse y mostrarse elegantes, muchas de ellas además exhibieron su pasión por los relojes de lujo.
En primer lugar destacaremos a la futura primera dama Jill Biden, quien es fanática de los relojes Cartier, particularmente de los modelos rectangulares como el Panthère en oro amarillo que utiliza muy seguido.
Por su parte la última primera dama, Melania Trump, es fanática de Vacheron Constantin, se la ha visto en algún que otro importante evento con un Kalla Duchesse que presenta una caja en forma de tonel con la esfera y el brazalete repleta de diamantes.
Otras amantes de las piezas de Alta Relojería fueron Michelle Obama, quien lucía un Cartier Tank Française con brazalete de acero, su reloj preferido con el que ha viajado por todo el mundo y Hillary Clinton que prefiere llevar un Rolex, marca con una larga trayectoria en la Oficina Oval. En la muñeca de la que fuera candidata a presidente puede verse habitualmente un Lady-Datejust de acero y oro amarillo de 26 mm.