El cantante canadiense Justin Bieber es un reconocido coleccionista de autos de lujo, uno de los mas espectaculares que posee es un Rolls-Royce Wraith al que le ha hecho una extraña y costosa personalización en la que gastó US$ 400 mil dólares.
La empresa encargada de cumplirle el deseo de transformar uno de sus vehículos favoritos es West Coast Customs, que reversionó este elegante y costoso modelo inglés para dejarlo con un aspecto similar al 103EX, perteneciente a la misma firma.
Lo que más lo asemeja a ese modelo concept ultrafuturista es la modificación de la zona de la carrocería donde las ruedas se encuentran totalmente ocultas hasta casi el ras del suelo. Otro detalle es que tampoco tiene espejos retrovisores ni manijas de las puertas.